PRIMER VUELO DE RADIO

Estaba en mis catorce aproximadamente, a mediados de los 70 y recuerdo que estaba en el aeropuerto “El Dorado” de Bogotá esperando a mi padre que venía de un viaje desde los Estados Unidos. Me sorprendí cuando me entregó una gran caja y me dijo que había encontrado un modelo especial de radio para aprender. !No podía creerlo! Pensé que se equivocaba al decir que era de radio, pero cuando abrí la bolsa y vi la portada de la caja mis ojos se abrieron al leer “…Radio Control Trainer”.

Era real… tenía mi primer modelo de radio conmigo…. Al igual que una larga tarea de matemáticas a las que le solía pedir ayuda a mi padre, así mismo gastamos bastante tiempo en leer una a una las instrucciones. Me sentía en un verdadero curso de aviación y en efecto fue el inicio de otra era.

 Recuerdo que lo llevamos a un parque solo a tratar de iniciar su pequeño motor de gasolina pero no pudimos lograrlo. Decidí ir con mi padre al pequeño aeródromo de radio control al norte de Bogotá llamado “El Morado” y allí algunos pilotos expertos me enseñaron los trucos para iniciar este motor.

Cuando por fin encontré a uno que me enseñara a volarlo recuerdo que me dijo que esperara mientras aterrizaba el de él y al tratar de cerrar la válvula rocé la invisible hélice a altas revoluciones con mi dedo y me hizo siete pequeñas cortadas. Aprendí de forma dolorosa más trucos.
Fueron muchos intentos fallidos donde el avión terminaba destrozado y después de repararlo con “epóxico” de cinco minutos intentaba una vez más.

Fue hasta que un famoso piloto Gabriel Ferro me gritó mientras volaba caóticamente de pérdida en pérdida…– ¡Para que vuele tiene que picarlo!...!Piquelooo! – Pero no entendía que era “picarlo” y me dijo …– !Bájale la nariz…down, down! – Y al hacerlo milagrosamente el avión se estabilizó y empecé por primera vez a sentir que tenía el control del vuelo.


Gracias Papi por este regalo que ha sido un regalo para toda la vida.



Esta es la portada de la caja donde venía mi primer avión
 de radio. Una bonita escala de una Cessna 210 Centurion.
 La recorté de la caja y la guardé como recuerdo 

y así la pude fotografiar para este libro.

 

Encontré esta foto cortesia de "Aeromodelismo Colombia" del capitán
 Gabriel Ferro de Avianca con uno de sus famosos modelos Cessna
 en la pista de " El Morado" al norte de Bogotá. Calculo esta foto es
 de inicios de los 70. De él recibí esa famosa frase.."Piquelo!! ".
Gracias capi Ferro!!!